Diseño atemporal. Colores claros, neutros, materiales naturales, paredes y carpintería blancas. Todo con el mayor detalle.
Características fundamentales para conseguir el máximo confort para los usuarios.
Luz natural. Grandes ventanales en fachadas. Puertas correderas de suelo a techo, como paredes que desaparecen, para que penetre la luz hasta el mismo corazón de la vivienda.
Amplitud y equilibrio. Para ofrecer más allá de la superficie, la máxima sensación de espacio, en sus estancias. Con las zonas de día y noche perfectamente definidas.
Flexibilidad. Las prioridades personales pueden ser diversas, las viviendas siempre se adaptan.
Sostenibilidad. Aislamientos acústicos y térmicos, con una aerotermia de ultima generación, para aportar el máximo confort con un elevado ahorro energético.
Racionalidad. Viviendas distribuidas para resolver las necesidades de sus usuarios.
Cocinas diseñadas de forma ergonómica, estudiando las zonas de almacenamiento, preparación, cocción, limpieza y lavado.
Bienestar. Edificios proyectados para satisfacer todas las necesidades de la sociedad actual, con el objetivo de conseguir el máximo confort.